lunes, 29 de marzo de 2010
FELICES PASCUAS
Que estas pascuas de Resurrección nos permita estar más unidos como FAMILIA
EL NUDO EN LA SÁBANA
En una reunión de padres, la Directora resaltaba el apoyo que ellos deben darle a los hijos. También pedía que se hicieran presentes el máximo de tiempo posible.
Ella entendía que, aunque la mayoría de los padres de la comunidad fueran trabajadores, deberían encontrar un poco de tiempo para dedicar y entender a los niños. Sin embargo, la directora se sorprendió cuando uno de los padres se levantó y explicó, en forma humilde, que él no tenía tiempo de hablar con su hijo durante la semana.
Cuando salía para trabajar era muy temprano y su hijo todavía estaba durmiendo. Cuando regresaba del trabajo era muy tarde y el niño ya no estaba despierto.
Explicó, además, que tenía que trabajar de esa forma para proveer el sustento de la familia. Dijo también que el no tener tiempo para su hijo lo angustiaba mucho e intentaba redimirse yendo a besarlo todas las noches cuando llegaba a su casa y, para que su hijo supiera de su presencia, él hacía un nudo en la punta de la sábana.
Eso sucedía todas las noches cuando iba besarlo. Cuando el hijo despertaba y veía el nudo, sabía, a través de él, que su papá había estado allí y lo había besado. El nudo era el medio de comunicación entre ellos.
La directora se emocionó con aquella singular historia y se sorprendió aún más cuando constató que el hijo de ese padre, era uno de los mejores alumnos de la escuela.
PARA REFLEXIONAR
1.-En casa ¿tenemos un tiempo o un espacio para dialogar, compartir, encontrarnos con nuestros hijos?
2.-¿Realizamos alguna actividad compartida (limpiar la casa, mirar T.V., salidas compartidas, escuchar música)?
3.-¿Nuestros hijos perciben nuestro afecto, nuestro cariño?¿Cómo descubren nuestro amor hacia ellos?
4.-¿Les hacemos saber que los queremos mucho? ¿Destacamos sus virtudes? O ¿Sólo recordamos sus defectos?
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